¿Imaginas que tu frigorífico hiciera un pedido cuando falta un alimento? ¿O que tu móvil te avise cuando has dejado el coche abierto? La finalidad, en ambas situaciones, es conectar al máximo objetos cotidianos para facilitarnos la vida mediante Internet.
Parece una idea muy futurista, pero ya estamos inmersos en esa etapa. Lo conocemos como el “Internet de las Cosas” o “IoT” (Internet of Things). Este concepto se aprovecha de parámetros como la temperatura, el estado, la ubicación, los errores… de manera automática con independencia del ser humano.
¿Cómo funciona el proceso?
Tras captar los datos anteriormente mencionados a tiempo real, deberán ser procesados y utilizados de manera óptima, para su objetivo final. Todo ello, será mucho más potente si lo unimos con otro concepto “novedoso”, la inteligencia artificial (IA). Esta tecnología, puede hacer posible reconocer patrones para tomar las mejores decisiones. Para las empresas presenta una gran ventaja, debido a que mejora su productividad, su calidad, su relación con los clientes y, además, provoca un ahorro de costes y riesgos.
¿Qué mejoras se obtendrán de este tipo de conexiones a internet?
- Se podrán prevenir algunas emergencias, tales como cambios estructurales en edificios o gestionar el tráfico, de una manera más eficiente.
- Se optimizará la medición de la calidad tanto del agua como del aire. De hecho, se podría reducir las fugas de agua hasta un 50% en 2025.
- En el sector industrial y energético, se podrá perfeccionar la cadena de producción y control remoto. Además, el sector sanitario y médico, dispondrá de una vigilancia continua y monitorizada de los pacientes.
- Se implementará una mejora del seguimiento del transporte y envíos, mediante una mayor integración de la plataforma logística.
- Una mayor conexión en las redes sociales y buscadores, como Facebook y Google. La mayor plataforma de búsqueda en internet quiere conquistar este terreno con nuevas herramientas.
- Las mejoras tecnológicas como el NFC, que facilitan el pago con tarjeta en comercios a través del dispositivo móvil. Otros ejemplos, podrían ser el Bluetooth 5.0 (con una transmisión más eficiente y con menos consumo de energía) y el LiFi (la tecnología que acabará con el WiFi debido al aumento de velocidad y que utiliza la luz).
Su uso generará una gran oportunidad en el mercado, de hecho, grandes compañías apuestan por ello como Samsung, Amazon, Google, IBM… Pero también, nuevas vulnerabilidades, como por ejemplo más ataques “DDoS” (ofensivas a las conexiones y servidores). Aún queda mucho camino por recorrer antes de que podamos ver avances significativos en nuestras vidas con esta nueva tecnología, que al fin y al cabo, será un servicio para hacernos el día a día más fácil.
Fran Berrocal.